martes, 25 de diciembre de 2012

Jesús


Es sumamente curioso que sobre uno de los personajes más influyentes de la historia de la humanidad, hay sobre 2.000 millones de cristianos en el mundo, no se tenga la certeza de su existencia histórica. Los cuatro evangelios, fuente básica de la vida de Jesús, son bastante posteriores a su existencia e incluso, según he leído, presentan contradicciones entre los evangelistas acerca de determinados hechos de su vida. No deja de ser llamativo que no aparezca en los documentos  contemporáneos del Imperio Romano. No olvidemos que precisamente hablamos del cénit de dicho Imperio, el más poderoso de la antigüedad, que controlaba exhaustivamente en esos momentos todos sus territorios con un gran sistema de comunicaciones y una tupida red militar y política. Incluso conocemos bastante bien muchísimos hechos de civilizaciones mucho más antiguas (Egipto, Mesopotamia...). Planteo esta reflexión porque hablamos sin ninguna constatación histórica del pesebre donde nació Jesús (ahora sin vaca ni burro, en el colmo del absurdo benedictino, fielmente seguido por la señora Botella y el señor Borbón en la escenografía de sus mensajes navideños), de que expulsó a los mercaderes del templo (en estos tiempos tendría trabajo estajanovista), de los milagros que hizo de los 30 a los 33 años (de la infancia a los 30 años está el vacío, bastante conveniente para dotar de halo misterioso al personaje). Un hombre que descolla de esa manera dentro del "limes" del Imperio ¿pasa inadvertido para los funcionarios romanos que tienen que velar porque no se les revuelva el avispero? Me genera muchas dudas, y que conste que quién esto escribe tiene claro que Jesús, más allá de su existencia material, es un personaje más real que el “escribidor” de este texto, un intelectual -individual o colectivo- fundamental en la historia de la humanidad, que trasciende el ámbito religioso, apareciendo su figura siempre (por su ejemplo de pobreza o por los ejemplos posteriores, a veces cuestionables o incluso  execrables, de las diferentes iglesias que toman su nombre) en un debate que a todos, ateos, agnósticos o creyentes, nos compete, el debate moral.

3 comentarios:

  1. Ya eso comentaselo a tus "amigos" del KGB que en la epoca Sovietica investigaron si existia la figura historica de Jesus y demostraron que era que si.

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  2. Hola Juan,me ha gustado tu artículo en el sentido de como está rrdactado y el dato revelador de que los evangelios fueron escritos bastante posteriormente a Jesús,aunque la verdad no sé,me esperaba algo más extenso y detallado.Yo también tengo un blog,aunque es para colgar historietas de cómic.Tengo algunos fallos pero todo es mejorable,y a la gente le gusta igual,o eso les conviene decir,jejeje.La dirección es: http://virgueriasilustradas.blogspot.com

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    1. Sólo pretendía ser una pequeña chispa reflexiva. Ni siquiera tenía prevista esta entrada. Te diría que ella se encontró conmigo, me salió al paso. Y soy consciente de que no profundizo nada históricamente, ni lo pretendía. Pretendía transmitir que, existiera o no, la figura de Jesús es muy real, pues gran parte de la humanidad, desde posiciones diversas, se reclama seguidora de él. Un saludo

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