miércoles, 11 de julio de 2012

Recortes: aplausos en nuestra cara y Venezuela

 11 de julio de 2012. Rajoy anuncia en el congreso toda una serie de medidas brutales, que el mismo anunciante considera que son dolorosas y que no estaban en su programa de gobierno y (no es metáfora)... le aplauden. Medidas que llevarán pérdida de calidad de vida y agravarán la pobreza de muchas familias trabajadoras y... le aplauden. Su mesnada aplaude subir el IVA, que a los trabajadores públicos nos roben una paga extra, que los parados a partir del sexto mes vean reducida su ayuda, etc. Saben... esos aplausos son bofetadas en nuestras caras, manotazos al "tonto del pueblo", risotadas incluidas, por parte de lacayos. El asunto es si esos aplausos, esas tortas infames, nos despertarán del "sueño de los injustos" que venimos durmiendo desde hace mucho tiempo. Sé que la respuesta a todas estas agresiones es la movilización continuada, pero... me ha cruzado por la mente (soy así, funciono a impulsos, a ráfagas, hago asociaciones que no sé si son correctas o no, quién lo lea juzgará) Venezuela.

La Constitución Bolivariana recoge una figura que (creo) es única en el mundo: el revocatorio. Si se reúne un número determinado de firmas (2.500.000 si la memoria no me falla) a mitad de mandato se somete a consulta popular si el presidente sigue o no. No hablo de fantasías, se llevó a cabo en agosto de 2004. Chávez siguió porque ganó ese referéndum. Ya sé que Rajoy es jefe de gobierno, elegido por los parlamentarios, no por nosotros directamente, mucha gente creo que desconoce hasta este dato. Aquí gozamos de la hiperdemocrática figura de un monarca y su ejemplar parentela. Venezuela... esa dictadura populista del "gorila rojo",  (glorioso momento cuando el regio cazador de elefantes lo mando a callar) puede mandar a la basura a su presidente en mitad de su mandato. Puñeteros países subdesarrollados. Menos mal que aquí nos gobierna un club de "ladies and gentlemen" que nos aplauden, entre sonrisas, en los cachetes. Por lo que a mí respecta, ya me tienen morado. Sin embargo parece que abunda la gente de moflete duro.


sábado, 7 de julio de 2012

Sin hacer ruido. Un par de apuntes minero futbolísticos

Añado aquí un par de apuntes que he enviado como comentario a noticias de la prensa. Parto de la lucha actual de los mineros y de la hipotética donación de Iniesta de su prima (carente de riesgo) copaeuropea. Son sólo pinceladas.


Les podemos poner todos los calificativos que queramos. Desfogarnos. Pero la realidad es terca, la derecha nominal tiene un gran apoyo aunque nos pese. Con todas las medidas que han adoptado (y las que anuncian) conservan una intención de voto del 37%. Yo miro hacia delante y veo un desierto devastador, blanco, vacío: es la conciencia de la mayoría de los trabajadores. Temo que la lucha de  los mineros es el canto del cisne, el último resquicio del Movimiento Obrero combativo, de masas. Yo pertenezco al sector de la enseñanza y sinceramente estoy asqueado de la docilidad con que aceptamos que nos modifiquen, a peor por supuesto, las condiciones de trabajo. Y tengo asumido un hecho: los retrocesos a los que nos están sometiendo no tienen vuelta atrás. Nos han derrotado en toda regla, sobre todo nos han emponzoñado la mente con sus ideas que no sé si calificar de venenosas o infantiles.  "De la crisis salimos todos juntos" ¿les suena? ¿no les parece una idiotez? Pues es lo que mucha gente de nuestro entorno, quizás hasta bien intencionados, cree. No me extiendo: pueden putearnos "hasta el infinito y más allá". Han devorado nuestra alma de trabajadores: la conciencia de clase.


El otro:

El problema no es que Iniesta done o deje de donar su prima por ganar la eurocopa. Lo que todos deberíamos plantearnos es que tendría que haber un limite a la riqueza desmesurada. Lo mismo que debe existir un salario mínimo, también es necesario plantearse una riqueza máxima. Nunca me resignaré a creer que unos pocos deben acumular riquezas que los harán ricos a ellos y sus descendientes por bastantes generaciones y otros han nacido para malvivir con enormes escaseces. Sé que es un tema que trasciende el fútbol y las fronteras de un país, pero yo espero que algún día los seres humanos borremos de nuestra conciencia esa sentencia tan nefasta y que tanto daño hace ideológicamente: "Siempre ha habido ricos y pobres y siempre los habrá". La pobreza y la riqueza no son designios divinos que sobre unos, los menos, arroja cataratas de maná y a otros los hace vagar por áridos e inclementes desiertos. Ambas (pobreza y riqueza) son obra humana, historia viva del hombre sobre la tierra. Eso que daban por muerto preclaros pensadores: la lucha de clases.

Y, aclarando, me gusta el fútbol, pero cada vez detesto más su desmesura, y no sólo la económica.