Las 300 mayores fortunas del
mundo acumulan más riqueza que los 3.000 millones de pobres.
Así lo afirma el profesor
Jason Hickel de la Escuela de Economía de Londres, asesor del movimiento The
Rules, que lucha contra la desigualdad, y autor de un video titulado 'La
Desigualdad de la Riqueza Mundial'.
"Citamos estas cifras porque nos ofrecen una comparativa clara e impresionante, pero en realidad la situación es aún peor: las 200 personas más ricas tienen aproximadamente 2,7 trillones de dólares, y eso es mucho más que lo que tienen 3.500 millones de personas, que tienen un total de 2,2 trillones de dólares", explica el economista.
"Citamos estas cifras porque nos ofrecen una comparativa clara e impresionante, pero en realidad la situación es aún peor: las 200 personas más ricas tienen aproximadamente 2,7 trillones de dólares, y eso es mucho más que lo que tienen 3.500 millones de personas, que tienen un total de 2,2 trillones de dólares", explica el economista.
Esta noticia salió el pasado 21 de julio. En ningún periódico del mundo apareció en enormes titulares a seis columnas. Desconozco si en alguno saldría siquiera en un pequeño recuadro de la portada. Un recuadro que debería reflejar de manera perpetua, día tras día, esa monstruosidad (¿cómo evolucionará? o mejor ¿se revolucionará?). También estoy convencido de que ninguna emisora de televisión abrió sus informativos con esta estafa monumental que deja a Bárcenas, Cospedales y Rajoys como lo que en el fondo son: unos mindundis, unos empleados (cierto es que muy bien remunerados y por lo que parece algo trapicheantes) de los grandes oligarcas. El escándalo del mentado Barcenas, y otros por el estilo, son nimiedades ante ese escándalo supremo que se llama sistema capitalista, que es el que permite esas aberrantes acumulaciones de capital en manos de 200 ó 300 personas. Ante estos individuos los superhéroes de la Marvel son unos pobres infelices. Estos tipos si que tienen superpoderes. Por ejemplo, Bill Gates era en 2011 el segundo del ranking con 56.000 millones de dólares. Suponiendo que gane dinero desde los 15 años, ahora tiene 55, dividiendo el dinero acumulado en esos 40 años entre las horas totales que ha vivido (incluso las que ha dormido, amado, festejado, vacacionado, todas, absolutamente todas) sale que el susodicho ha acumulado cada hora de su vida 160.000 dólares (120.000 euros, el salario español medio de 6 años). Eso es ser un héroe del trabajo y no los estajanovistas que se premiaban en la extinta URSS. Ahhhh... claro, tienen trabajadores, no había caído en ese pequeño detalle. Incluso alguno los tiene (muchísimos) en países con salarios muy bajos. Vaya, vaya.
Goethe dijo: "prefiero la injusticia al desorden". Si se es hijo de un consejero imperial alemán la frase tiene su lógica. No siempre uno desafía, intelectualmente y en la práctica, a su propia clase social (caso de Engels). Pero más allá de esa circunstancia, y preferencias aparte, si el cuerpo social que es víctima de la injusticia no agoniza o languidece, lo más lógico es que la propia búsqueda de justicia alumbre un verdadero orden.
A mí que una aldea de 300 habitantes pueda tener más riqueza que, por ejemplo, toda la población de Sudamérica, Europa y África, me parece el más grave de los desordenes y la más lacerante de las injusticias.
La desigualdad en lo cualitativo.
ResponderEliminarCuando se dice que 300 perosonas acumulan más riqueza que 3.000.000.000 de personas hay que matizar no sólo la cantidad, sino también la cualidad de esa riqueza. Los tres mil millones de pobres apenas pueden satisfacer sus necesidades más básicas y elementales para mantenerse vivos con la riqueza que poseen. Y necesitan trabajar todos los dias para reponer lo que apenas consumen el día anterior.La riqueza que acumulan los tres mil millones de pobres o míseros son pobreza, son ausencia de muchos de los medios de vida más elementales y básicos. Son ausencia de medios de tabajo, y por tanto de medios de vida.
Por otro lado, la riqueza de las 300 personas más ricas del mundo son capital. Son los medios de trabajo y de vida de los tres mil millones de pobres. Son la riqueza que han producido miles de millones de trabajadores . Y la producción basada en la propiedad privada de los grandes medios de producción, y el mercado capitalista global, han hecho posible su concentración en manos de los no trabajadores, de los grandes propietarios. Son la posibilidad material que hace que los pobres sigan siendo cada vez más pobres y que los grandes ricos sean cada vez más ricos.
Y esto debe ser denunciado por los economistas que quieran acabar con la desigualdad en la distribución de la riqueza mundial. No basta con señalar el hecho. Hay que explicar su razón de ser. Y hay que explicar las consecuencias del mismo. Además de considerar las formas de la riqueza que se encuentran en entre los extremos de la ausencia absoluta de medios de vida, la pobreza extrema, y la concentración extrema de la riqueza mundial en pocas manos, la más lacerante de las inhusticias y enajenación del hombre, la libertad en el límite de la propiedad privada.
Un afectuoso saludo.